El primer ministro checo, Andrej Babis, exhortó a buscar una solución colectiva a la inmigración ilegal en Europa.
En una entrevista televisiva, Babis se mostró convencido de que las recientes manifestaciones antiinmigración en Chemnitz, en Alemania, constituyen un detonante peligroso.
"Desde luego que sí. Europa está dividida. [El presidente francés Emmanuel] Macron quiere incluso organizar una cumbre para distribuir a los inmigrantes ilegales, eso no es normal", subrayó Babis.
El jefe del Gobierno checo añadió que "es necesario pararlo realmente, no es posible que Malta rechace a un barco (con migrantes) y España lo acoja, debemos combatir de forma eficaz a los traficantes".
"Chemnitz está a la vuelta de la esquina, nos importa lo que está pasando en otros países, no queremos vivir aquí como si fuera África", afirmó.