Los 177 inmigrantes que esperan desde hace seis días un puerto seguro, a bordo de un barco de los guardacostas italianos, llegarán en las próximas horas a Catania (Sicilia), pero no desembarcarán hasta que la Unión Europea decida repartirlos entre diversos países. Esta es la decisión que tomó el Gobierno italiano después de que el barco "Diciotti" de la Guardia Costera italiana haya estado cinco días esperando en el mar, mientras las autoridades de Italia y Malta debatían qué país debía hacerse cargo.
Fuentes oficiales confirmaron a Efe que "el Ministerio del Interior italiano no ha dado ni dará ninguna autorización (para desembarcar) hasta que no tenga la certeza de que los 177 inmigrantes irán a otros países" comunitarios.
Los inmigrantes no podrán pisar tierra hasta que la UE ofrezca una solución de reubicación para estas personas.